Acercamiento a la Biblia
Jesús es tentado
1. Las tentaciones en el desierto. Mateo 4, 1-11
Después del Bautismo, Jesús se retiró al desierto.
Estuvo sin comer durante cuarenta días y cuarenta noches; y al final tuvo hambre. Entonces se presentó ante Él, el demonio, y tenía preparadas tres pruebas.
En primer lugar, el demonio le tentó diciendo:
- Si eres Hijo de Dios y tienes hambre, haz que estas piedras se conviertan en panes.
Pero Jesús le respondió.
- No solo de pan vive el hombre, sino de toda Palabra que sale de la boca de Dios.
Y no hizo el milagro que quería el demonio.
Esa fue la primera tentación.
Más tarde, el demonio llevó a Jesús hasta lo más alto del templo de Jerusalén. Estando allí, volvió a tentarlo diciendo:
- Si eres Hijo de Dios, tírate y que te vean todos los que están en el templo como no mueres, porque está escrito que tus ángeles te recogerán y que nada malo te sucederá.
- En la Biblia está escrito que no se debe tentar al Señor tu Dios - contestó Jesús. Y tampoco esta vez hizo nada extraordinario para demostrar su poder divino.
Por tercera vez insistió el demonio y volvió a tentar a Jesús. Lo llevó a lo alto de un monte, y desde allí le mostró todo el mundo y le dijo:
- Te haré rey del mundo si te arrodillas ante mí y me adoras.
- Apártate, Satanás -respondió Jesús al demonio-, porque está escrito: «Adorarás al Señor tu Dios y sólo a Él darás culto».
Entonces, el demonio se fue y unos ángeles de Dios vinieron a hacer compañía a Jesús.